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Emilio Moro es un clásico moderno de Ribera del Duero y vino de gran linaje. Creado como homenaje al fundador de la prestigiosa bodega que lleva su nombre. Nace de viñedos de una edad de entre 12 y 25 años. Con una crianza de 12 meses, destaca la excelente integración de la madera en el conjunto.
Color vivo e intenso con un gran aroma, marcados ambos por la presencia de frutos negros maduros. Carnoso y frutal en boca. Tempranillo
Vino de Pasto, con carácter frutal y mineral gracias a los suelos de Albariza.
El Muelle de Olaso es amable, persistente y gustoso. Muy glicérico, con una corpulencia apreciable, es ideal para gastronomías juguetonas y para su disfrute en las añoradas barras. Notas de fruta madura, almendras y una encarnadura en la boca que no deja de crecer.
Vino de capa media y color rojo granate con destellos amoratados. En la nariz encontramos fruta roja madura (cereza), recuerdos a especias (clavo, canela) y humo. En boca es redondo y equilibrado, con volumen, sabroso y persistente. Volvemos a encontrar en la boca aquella fruta que disfrutamos en nariz junto con un final de tofee y café propio de su estancia en barrica. Multipremiado.
Hacienda Grimón elabora este blanco fermentado en barrica a partir de una muy pequeña producción de Viura. Buscando elaborar un blanco parecido a los de antaño, envejecen esta pequeña producción y logran sutiles aromas de roble tostado sobre un fondo de fruta fresca.
Tinto joven de gran intensidad. Muy aromático, equilibrado, con sabor a frutas maduras. En boca es fresco, voluminoso y con un post-gusto largo. Es el ejemplo perfecto de la tipicidad de la Cariñena en el Montsant.
Una agradable sensación de frescura y un final limpio, largo y persistente.
Edición Limitada de 5.000 botellas.
Vino con buena acidez, frescura y salinidad.
Vino Ecológico y de mínima intervención. Filosofía Natural.
Producción 2.700 botellas
Flores de Tarima en tu vaso con notas de regaliz y chocolate, con un fondo sutil a hierba y cualidades florales.
Nacido de cepas valientes, fuertes y salvajes, plantadas en altitud, el Particular Garnacha es un vino muy vivo, limpio y brillante. El dibujo de una cruz en su etiqueta nos recuerda la forma en la que los antiguos viticultores de la bodega marcaban las barricas para distinguirlas.
Como resultado de recuperar la tradición mallorquina, surge este vino fresco y ligero a partir de las variedades autóctonas Malvasía y Giró Ros.